Edward Snowden ¿héroe incomprendido?
De tener una vida ascética y aislada, Edward Snowden se convirtió de un día para otro en uno de los hombres más buscados y perseguidos por el gobierno de Estados Unidos.
Snowden, quien trabajó para la CIA desde 2006 y para la NSA desde el 2009, comenzó a filtrar evidencia que demostraba que las agencias de inteligencia de Estados Unidos espiaban y recolectaban información confidencial de millones de personas alrededor del mundo, noticia que causó revuelo y escándalo entre la prensa internacional y el público en general.
Fue en junio de 2013, que Edward Snowden contactó por primera vez a los periodistas Gleen Greenwald y Laura Poitras, a quienes pidió a través de correos electrónicos encriptados que se reunieran con él en la ciudad de Hong Kong.
Durante las siguientes semanas, los medios internacionales se llenaron con titulares alarmistas en los que se acusaba al gobierno de Estados Unidos, en particular a la National Security Agency (NSA) de espiar las llamadas telefónicas de miles de personas a nivel internacional, además de llevar registro de cuentas bancarias, transacciones y actividad de perfiles de redes sociales como Google, Facebook, Youtube, Skype, entre otros populares servicios.
Después del fatídico 11 de septiembre del 2001, el gobierno estadounidense radicalizó sus métodos de vigilancia y seguridad con el apoyo del Congreso, quien aprobó la Patriot Act, una ley que permite monitorear a todas aquellas personas sospechosas de actos terroristas, siempre y cuando estuviera supervisado y autorizado por el mismo pleno del parlamento.
Snowden demostró con su información filtrada que la NSA mantenía vigilancia sobre personas con ningún antecedente delictivo, lo que suponía una grave violación a la privacidad y los derechos humanos universales.
Después de que el "whistleblower" expuso todos estos datos en verano del 2013, su identidad fue dada a conocer y el Departamento de Justicia lo culpó de violar la ley de espionaje y de robar documentación clasificada del gobierno, condena que ascendía hasta 30 años de cárcel.
En ese momento, la opinión pública se dividió entre personas que veían a Snowden como un valiente héroe y patriota, y otros que lo calificaban como un traidor y un personaje que ponía en peligro la seguridad nacional, por lo que inmediatamente abandonó Hong Kong y con ayuda de la ONU logró viajar a Moscú con el objetivo de obtener un asilo político y evitar la detención por parte de las autoridades estadounidenses.
Snowden pasó 39 días en el aeropuerto de la capital de Rusia en donde se dice que pidió asilo a más de 21 países, lo que terminó con un permiso de residencia por un año otorgado por el presidente Vladimir Putin.
Hoy en día, el informante continúa en Rusia en donde se le fue concedida una prórroga de dos años más con la que puede viajar a lo largo de todo el país con un viaje de tres meses de duración al extranjero.
Nadie conoce la ubicación exacta de Snowden, quien en una entrevista otorgada a principios del 2015 afirmó que quiere pedir asilo en Suiza, lugar en donde estuvo trabajando como espía encubierto de la CIA a mediados de los dos mil.
Después de dar a conocer el arriesgado procedimiento de vigilancia y espionaje aplicado por la NSA Snowden comentó "No quiero vivir en una sociedad que hace este tipo de cosas, que vigila a sus propios ciudadanos, no quiero vivir en un mundo donde todo lo que hago y todo lo que digo es grabado, mi único motivo es el de informar al público lo que se ha hecho a su nombre y lo que se ha hecho en su contra"
Snowden arriesgó su propia libertad en pos de la información, en pos de un ciudadano consciente y alerta ante las intransigencias y el poder del gran sistema gubernamental, pero sobre todo sacrificó su libertad con el fin de lograr un país democrático, en donde la libertad de expresión y de opinión no sea coartada ni limitada bajo ninguna circunstancia.
Muchos detractores podrán afirmar que Edward Snowden pone en peligro la seguridad del país, sin embargo como lo afirmó la revista Forbes: "el efecto Snowden ha evidenciado un extraño movimiento bipartidista en el congreso de Estados Unidos, en donde un parlamento intransigente y dividido se ha unido bajo la opinión de que el sistema de inteligencia implementado después del 9/11 ha ido demasiado lejos."
Con las revelaciones heroicas de Snowden se puede afirmar que una cosa es un sistema de protección y vigilancia puntual que sirva como prevención ante un inminente acto terrorista y otro tema muy distinto, es una violación constante a la privacidad y derecho de los ciudadanos por una sana libertad de expresión sin amenaza ni paranoia injustificada por parte de los entes gubernamentales.
"Para mí, en términos de mi satisfacción personal, la misión se ha cumplido, ya he ganado. En cuanto los periodistas comenzaron a divulgar la información, todo lo que siempre intenté hacer fue validado. Porque, recuerden, no quiero ni quise cambiar a la sociedad, quise darle a la sociedad una oportunidad para determinar si se quiere cambiar a sí misma. Todo lo que quise fue que el público fuera capaz de tener palabra y opinión en cómo deben ser gobernados."